Las chicas pueden ser intensas persiguiendo sus objetivos. Smiling Lussy era una de ellas. Fue al banco a buscar un préstamo para abrir su negocio de comida a domicilio, pero no era apta. Sabía que los grandes bancos no le prestarían, por lo que su única opción era una agencia pequeña. El gerente era cachondo y apuesto. Cuando la llamó para reunirse, ella sabía lo que le pediría. Lentamente puso su mano en su pantalón y sintió su polla que ya estaba bien dura. ¡Y ella sabe cómo trabajar esas salchichas!
Esta repartidora se ocupará de tu salchicha
- Añadido: 13.04.2018
- Duración: 41:59